El mundo laboral está al borde de una transformación significativa, impulsada por la digitalización y la inteligencia artificial (IA). Según el Foro de Davos, la mitad de los empleos actuales experimentarán una metamorfosis considerable, y se espera que el 80% de los trabajos más demandados en 2030 todavía estén emergiendo o hayan aparecido recientemente.
En 2023, España enfrenta un desafío particular: más de 6.500 ofertas de empleo en data e inteligencia artificial quedan sin cubrir debido a la escasez de profesionales calificados. Este dato, que representa aproximadamente el 20% del total de ofertas en este campo, destaca la urgencia de adaptarse a las nuevas realidades del mercado laboral.
La IA generativa, que ha evolucionado de realizar tareas específicas a comprender y operar sobre una amplia base de conocimiento humano, se está convirtiendo rápidamente en un elemento diferenciador tanto para individuos como para empresas. Su capacidad de generar textos, códigos, imágenes y audios a partir de grandes modelos de datos está revolucionando diversos sectores, desde las finanzas y la investigación científica hasta la creación audiovisual y la energía.
Los estudios actuales anticipan que los trabajos más demandados en 2030 estarán relacionados con big data, biotecnología, nanotecnología, la nube y el marketing digital. A pesar de los temores de que la IA reemplace a los trabajadores humanos, el Foro de Davos estima que se crearán 69 millones de nuevos empleos, aunque también se perderán 83 millones de puestos de trabajo existentes.
Ante este panorama, las empresas se están preparando para integrar la IA generativa en sus operaciones diarias. Este esfuerzo requiere una inversión significativa y un enfoque en la formación continua. La inteligencia artificial no solo está optimizando tareas internas sino también impulsando la innovación y la personalización de productos y servicios.
En este contexto, muchas empresas están estableciendo Centros de Competencia en IA para explorar nuevas aplicaciones y herramientas. Estos centros también se enfocan en garantizar la implementación de modelos de IA responsables y seguros, respetando la legislación vigente y considerando las consecuencias éticas de su uso.
La adopción de la IA generativa en los negocios y la vida cotidiana de los empleados es un testimonio de la sólida trayectoria en transformación digital de muchas organizaciones. Estas entidades continúan profundizando en sus programas digitales, preparándose para los desafíos tecnológicos futuros y aprovechando la IA para mejorar la toma de decisiones en tiempo real.
Este momento histórico ofrece innumerables oportunidades para las personas, permitiendo que la tecnología asuma tareas tediosas y repetitivas, y abriendo espacio para que el talento humano aporte mayor valor. La clave para el futuro del empleo y la formación radica en la habilidad para integrar y aprovechar la inteligencia artificial generativa de manera efectiva, y apoyarse en la formación continua que le acompaña.
Por ello, la inteligencia artificial ha dejado de ser la protagonista de películas de ciencia ficción. La llegada de IA y las herramientas como ChatGPT o DALL-E ha puesto en evidencia que esta materia forma parte ya de nuestra realidad, y que se necesita una gran cantidad de formación y reciclaje. Según un informe del Parlamento Europeo, se prevé que en 2028 la inteligencia artificial contribuya con más de 11 billones de euros a la economía mundial.