Para calcular el crédito de formación total disponible para bonificaciones, se puede utilizar la siguiente fórmula: multiplicaremos las bases de cotización de Formación Profesional (FP) del año anterior por el 0.7% y por un porcentaje que se extrae de la normativa del sistema. Esta tabla asigna un porcentaje según la plantilla media de la empresa. Por ejemplo, para una empresa con tres trabajadores, corresponde un 100%.
De esta manera, determinamos el crédito máximo bonificable para la empresa. Es importante considerar dos aspectos adicionales: el crédito mínimo garantizado es de 420 euros, lo que significa que si la fórmula resulta en un crédito menor, se ajustará a 420 euros. Para las empresas de nueva creación que no tienen cotizaciones del año anterior, el cálculo del crédito se basa en multiplicar el número de trabajadores del primer mes por 65, obteniendo así el crédito disponible.
Supongamos un ejemplo de una empresa bonificada de 80 empleados con bases de cotización del año anterior de 950.000 euros. Aplicando la fórmula y considerando que el número de empleados corresponde al tramo de 50-249 trabajadores, se utilizaría un 60%. Al sustituir estos valores, obtenemos un crédito de 3.780 euros, que sería el máximo bonificable para este año.
Esta cantidad representa el límite máximo de bonificación, pero para alcanzarlo, la empresa debe justificar actividades de formación equivalentes a esa cantidad. A continuación, veremos cómo se calcula la bonificación máxima por cada acción formativa, considerando diferentes modalidades como presencial, online o mixta. Los niveles formativos varían el precio del módulo: 9 euros por hora y alumno para niveles básicos, 13 euros para superiores y 7.50 euros para formación online.
Para calcular esta bonificación, multiplicamos el número de empleados participantes finalizados por las horas de formación y por el precio del módulo correspondiente a su modalidad y nivel. Si la formación se contrata a una entidad organizadora, la bonificación máxima puede incrementarse un 10%, si la plantilla es superior a 10 empleados..
Finalmente, la cofinanciación mínima requerida por la empresa varía según su tamaño, y puede oscilar entre el 5% y el 40%. Esto incluye tanto los costes de formación como los salariales. La aportación de la empresa se calcula restando la bonificación del coste total, y la cofinanciación es el porcentaje que esta aportación representa respecto al coste total de la formación.
Por ejemplo, para un curso presencial de 30 horas para una empresa de 20 alumnos empleados con un coste de 7.800 euros y una bonificación de 7.800 euros, si el coste salarial global es de 12 euros por hora, la empresa bonifica 7.800 euros, pero el curso se realiza en jornada laboral durante 9 horas.
La cofinanciación privada no dineraria dentro del marco de la formación bonificada administrada por FUNDAE implica que las empresas contribuyan al coste total de la formación de una manera que no necesariamente implica un desembolso financiero directo. En su lugar, este tipo de cofinanciación puede incluir el tiempo laboral que los empleados dedican a formarse durante sus horas de trabajo. De esta forma, las empresas asumen el coste salarial de los empleados en formación, considerándose esto como una inversión en su capacitación.
Existen principalmente dos maneras en que las empresas pueden cumplir con el requisito de cofinanciación:
1. Optar por recibir menos bonificación que el monto realmente pagado por la formación, lo que típicamente ocurre cuando la formación se lleva a cabo fuera del horario de trabajo.
2. Facilitar que la formación tenga lugar dentro del horario laboral, contabilizando como parte de su aportación los costes salariales incurridos durante este periodo.