Disponer de un equipamiento tecnológico adecuado es clave en la formación online.

La integración de pantallas táctiles gigantes con wifi posibilita la formación a distancia.

Las aulas de formación están cambiando a un ritmo frenético. El modelo educativo basado en libros de texto y clases magistrales presenciales ha cambiado por completo para dar paso a la formación remota y online.

Las claves de este nuevo modelo se centran principalmente en saber asesorarse correctamente ya que hay una amplísima oferta de soluciones en el mercado, y se sigue comercializando productos que ya llevan casi una década en el mercado. Es clave disponer de la tecnología apropiada y recibir la formación necesaria para que el equipo humano lo pueda aprender e integrar con agilidad en la formación del centro. La formación online es mucho más individual y libre y esto es posible gracias a la conectividad y a software en la nube que permite al usuario conectarse y trabajar cuando quiera y desde donde quiera. De esta manera, el usuario puede compatibilizar el estudio con otras tareas domésticas o laborales, requisito que a día de hoy es clave para seguir formándose sin apenas tiempo para ello. Para conseguir una correcta transformación de las aulas físicas a las virtuales, Stephen Bernard, responsable de la marca Legamaster en España recomienda analizar varios detalles relacionados  con el equipamiento tecnológico que conviene adquirir para garantizar no quedarse atrás:

  1. Pantallas táctiles de gran formato: son pantallas grandes como las Smart TV pero incluyen una función táctil para el ponente o moderador. Son imprescindibles en un aula tanto para la formación presencial como para la formación online. En esta última es necesario disponer de tecnología con características avanzadas de vídeoconferencia y audio para poder realizar una correcta transferencia de la información. De esta manera, tanto el docente como el alumno puede interactuar en tiempo real con los contenidos digitales combinando textos, imágenes, vídeos y animaciones para intercambiar contenidos audiovisuales. Las nuevas e-screens táctiles de Legamaster funcionan como si de una tablet gigante se tratara y son compatibles con varios sistemas operativos como Android, Windows o IOS de Mac. Están disponibles en tres tamaños de 65”, 75” y 86” pulgadas y tienen un router wifi incorporado para conectarse fácilmente a una red inalámbrica y, a la vez, conectarse a los dispositivos de los alumnos, ya sean tablets, ordenadores o móviles.

“La ventaja de estas pantallas es que sirven tanto para clases presenciales como para realizar formación online, y tienen una capacidad multitáctil de última generación que permite hasta 32 toques simultáneos lo que es muy importante para exposiciones en las que participen varias personas al mismo tiempo”, explica Bernard. La calidad de la imagen (hasta 4K en los modelos UHD) es de excelente resolución, lo cual condena a los proyectores convencionales actuales a la obsolescencia. “Estas pantallas tienen también otra función única, que es control de brillo automático, y los altavoces incorporados aportan el audio necesario para realizar clases online o presenciales evitando tener que hacer instalaciones de muchos elementos sueltos en el aula”.

  1. Utilizar un software eficiente. En la formación online los usuarios valoran en gran medida que el docente pueda desarrollar las clases de manera ágil usando contenidos digitales con amplias opciones audiovisuales. Para ello, es necesario trabajar con un software eficiente cuyo funcionamiento sea rápido e inmediato y pueda ser utilizado a la vez por todos los alumnos estén presentes o no. Legamaster usa el software Flipbox Suite el cual permite que cada participante puede utilizar la pantalla Legamaster desde su propio ordenador, tablet o Smartphone.

Este software facilita el trabajo colaborativo siguiendo el concepto Bring Your Own Device (trae tu propio dispositivo), es decir, permite compartir el contenido de cada PC o tablet de forma inalámbrica en la pantalla para intercambiar información con los demás en tiempo real. “Es una solución muy interesante para fomentar la formación online. Gracias a este software es posible mantener la comunicación con cada alumno ya que luego puede consultar en casa todo lo que ha estado viendo en clase. La interfaz del usuario está diseñada de manera que sea muy intuitiva y con elementos muy sencillos para que todo el mundo pueda utilizar el software sin ningún tipo de formación previa”.

  1. Mobilidad y flexibilidad: Una de las ventajas que tiene la formación online es que permite a los usuarios compatibilizar los estudios con otras tareas. La flexibilidad horaria y espacial es total en este tipo de formación ya que los usuarios pueden acceder a los contenidos cuando y donde quieran. “En la sociedad actual este es un punto clave y por eso la formación online es la modalidad de formación que está en alza y es estratégico para las empresas que se dedican a ello. La tecnología ofrece la posibilidad de realizar varias tipos de actividades interactivas y esto motiva a mucha gente a estudiar ya que no son actividades monótonas sino dinámicas y entretenidas”, afirma Bernard.

Para que la formación online sea completa y se realice de manera adecuada, existen varias plataformas online o campus virtuales que hacen un seguimiento exhaustivo de los progresos de cada alumno, con registros de las veces que entra, el tiempo que invierte en cada bloque, los resultados de los ejercicios, e incluso las comunicaciones que ha tenido con el tutor. “Así, este tipo de plataformas facilitan al profesor las tareas de evaluación de sus alumnos y las tutorías online se pueden centrar en temas concretos en función de los resultados de los ejercicios, consiguiendo así una atención personalizada con cada alumno”.

Artículo redactado por: Legamaster